Pues sí, así he titulado esta entrada, pero he de confesar que lo he hecho para llamar tu atención. En realidad, el motivo de escribir hoy aquí es porque esta mañana, mientras hacía la comida, escribía, limpiaba, escribía, sacaba a la perra, seguía cocinando, volvía a escribir, etcetera, escuchaba el último concierto de Alejandro Sanz en Madrid. Él y una amplia camarilla de amigos suyos cantaban sus canciones y... ¡oh, sorpresa! ¡eran de amor! ¡románticas! ¡muy románticas! Supongo que no hace falta decir que el susodicho cantante y autor me encanta. Peroooooo en un momento dado me pregunté: ¿por qué nadie pone pegas a las canciones románticas? Nadie dice que es un género menor, ni se extraña de que los hombres las escriban, ¡ni de que las canten!
Entonces... ¿qué pasa con la novela romántica? ¿Por qué ha sido siempre el patito feo de los géneros literarios? ¿Quizás porque sean mujeres la mayoría de sus autores? ¿Qué creéis? ¿Irán por ahí los tiros? Más que juzgar el género en sí, lo que se trasluce de todo esto es la historia de siempre. Seguro que si hubiese más hombres que mujeres que escribiesen novela romántica no existiría esa diferencia "de clases", ¿no creéis?
Pues seguramente, querida Begoña tendrñia una legión de seguidoras
ResponderEliminarAunque muchos de lo de su especie jejeje le pondrían a parir.